sábado, 17 de septiembre de 2011

Júpiter


¿Cuán grande es la gravedad en Júpiter? Recuerdo que en un documental de la BBC hablaban del cómo el tamaño de Júpiter provoca que exista una gravedad tan, pero tan fuerte, que sería capaz de hacer mierda en sólo minutos a cualquier ser humano que llegase a su atmósfera.

Hay una luna de Júpiter, Europa que tengo entendido está hecha en base a hielo y cabe la posibilidad real de que exista vida. Otra cosa loca es que Júpiter no tiene superficie sólida, es una masa esférica de gas en el espacio. Conshesumare, debe ser re loco que el que armó el planeta así.

Hay mucho humo y muchas luces de colores, el ruido es ensordecedor y se escucha David Bowie. La gente habla cada vez más fuerte en la penumbra y con la música a todo volumen yo siento que me alejo cada vez más de mi entorno.

2001 Odisea en el espacio, debe ser el resultado de meses de introspección y experimentación del LSD, por algo se va en esa volá de ácido el astronauta que llega a Júpiter. Quizás la prospección de nuestro futuro tomando soma.

Quiero cantar, pero no recuerdo ninguna canción en este rato. Me tocaron el hombro. Alfa centauri, no sé dónde queda esa estrella.

Cuando niño me asustaba pensar en que el sol creciera e hiciera desaparecer el sistema solar con nosotros incluídos, era un miedo tan grande como el miedo a los extraterrestres y al opening del programa OVNI, de Patricio Bañados.

Se dio vuelta el vaso en la mesa, es como leche derramada, como la vía láctea. El otro día encontraron una galaxia gemela a la vía láctea, quizás en ese lugar está el espejo sin vicios de nuestra existencia. La gente se ama libre sin culpas, quizás no existe Maná ni U2 y puedes comer frutas con sabor a licor dulce.

-Tenís los ojos chinos.

Júpiter también tiene un aro de asteroides como Saturno, pero mucho menor. El primero que vio el planeta con buena definición fue Galileo. Italiano culiao, era seco.

-¿Te querís ir pa la casa?

-¿Y si me voy a Júpiter mejor?

-¿Qué weá?

-A Júpiter.

-Despídete de los cabros y te acompaño al colectivo.

Salimos del local. Paró el colectivo que me servía.

-¡Chao cabros!

-Chao Enrique.-Dijeron los cabros.

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